Cruz Roja Española

Talleres Autoexpresión: Conclusiones y Recomendaciones

· CONCLUSIONES
Mujeres mayores de 16 a 25 años
Las conclusiones y recomendaciones que presentamos a continuación parten de los temas tratados durante los 12 talleres llevados a cabo en seis provincias con el fin de desarrollar el proyecto piloto “Talleres de sensibilización con perspectiva de género en interculturalidad sobre la discriminación de la que son objeto las mujeres en el ámbito laboral”. Es preciso aclarar que, pese a la participación de 126 mujeres en el proyecto, los resultados que expondremos deben circunscribirse a un determinado marco de acción acotado por tres elementos fundamentales:
  • Se ha tratado fundamentalmente de mujeres contactadas a través del servicio de empleo de Cruz Roja Española, aunque la mitad de ellas no hayan participado todavía en el mismo. Esto marca una diferencia con aquellas mujeres que nunca han participado en ningún programa de empleo, o bien con mujeres que están satisfactoriamente integradas en el mercado laboral español, incluso en empleos cualificados, ya sean inmigrantes o españolas.
  • Se ha tratado fundamentalmente de mujeres latinoamericanas, debido a que la participación en estos servicios de mujeres españolas y africanas es menor. Por este motivo, la situación de la mujer africana aparece muy sucintamente tratado. Mientras que el aporte de las mujeres españolas ha sido más amplio en los grupos de mujeres mayores de 45 años.
  • En los talleres se ha centrado el tema fundamentalmente en los procesos de inclusión laboral en España, estando subordinados a éste el resto de los temas aparecidos. Esto es debido fundamentalmente a los objetivos del proyecto piloto
Este acotamiento de los resultados no supone que no se puedan establecer algunas generalidades que, de hecho, serán las que presentemos en esta parte. Finalmente, también debemos aclarar que estas conclusiones no son el resultado de un análisis discursivo de lo hablado por las mujeres, sino que se refieren más bien a lo contrario: lo que ellas expresan, sienten y viven, es decir, se trata de una exposición descriptiva de estos pareceres u opiniones. La decisión de centrarnos en el aspecto descriptivo más que discursivo viene dada por nuestro objetivo de implantar las técnicas grupales como espacios de encuentro y creación de solidaridades. El proceso crítico de dilucidar las estructuras económicas, sociales o culturales puede darse lugar en estos encuentros pero en el caso de que los talleres puedan seguir realizándose en el futuro.

CONCLUSIONES

Los grupos de mujeres con mayores problemáticas en relación al empleo son:
  • Jóvenes menores de 25 años que no han finalizado los estudios secundarios obligatorios.
  • Mujeres sin estudios.
  • Mujeres extranjeras sin la homologación de sus titulaciones secundarias o universitarias.
  • Mujeres mayores de 50 años con estudios primarios o secundarios sin concluir u homologar.
RECOMENDACIONES

Los servicios de empleo deben incorporar la heterogeneidad de las situaciones por las que atraviesan las mujeres, y las múltiples variables que determinan sus trayectorias laborales, lo cual nos ayudará a diversificar la oferta formativa, laboral y en recursos, con el fin de ajustarnos más a las necesidades de cada cual.
Es más propio hablar de “situaciones” o “posiciones”, que de “perfiles”.
CONCLUSIONES

Todas estas mujeres, sin excepción, han coincidido en señalar las mayores dificultades que existen, en los últimos años, para conseguir un trabajo con cierta estabilidad y que permita su sostenibilidad, debido a:
  • El aumento de los precios de los alimentos.
  • El aumento de los precios del petróleo (que repercute en los anteriores y también en la menor ganancia de las empresas o el mayor gasto de quienes emplean mujeres en el servicio doméstico).
  • El aumento del Euribor (que repercute en una peor situación de las familias con créditos hipotecarios y también sirve de justificación para rebajar las condiciones laborales de las empleadas de hogar).
  • La crisis del sector de la construcción (que tiene una incidencia catastrófica en el empleo de los hombres en general y de los inmigrantes en particular; muchas mujeres inmigrantes parejas de éstos, se han visto en la situación de mantener a todo el grupo familiar).
  • El desempleo en diversos sectores aumenta el umbral de tolerancia de los trabajos y de las condiciones de los y las trabajadoras, sobre todo inmigrantes, pero también de los y las españolas que vuelven a optar por incorporarse a trabajos que habían abandonado (agricultura, servicio doméstico, hostelería), entrando en competición con las inmigrantes que ya estaban insertas en éstos. Todo lo cual refuerza el rechazo.
RECOMENDACIONES

Los servicios de empleo deben incorporar, en mayor medida, la visión estructural económica, social, jurídica y laboral que determina las mayores o menores dificultades de acceso al mercado de trabajo.

La incorporación de la visión estructural es posible en el acompañamiento individual, pero es más fácil reconocerla en las técnicas grupales, en las cuales las personas, atravesadas por similares variables obstaculizadoras, comparten discursos, opiniones y vivencias. Esto favorece la conciencia crítica y agudiza el sentido de responsabilidad, que queda más restringido a las propias decisiones, sabiendo separar lo que depende de cada uno/a y lo que depende del sistema económico y laboral en el que se encuentran.

La conciencia crítica sobre la realidad y sobre las propias motivaciones o decisiones ayuda, a su vez, a centrar el proyecto laboral y de vida en una dimensión práctica, poniendo mayor esfuerzo y energía en objetivos realistas.

Es preciso potenciar, en la medida de lo posible, la conciencia crítica y el conocimiento de la realidad política, social y económica en el contexto español e internacional. Las técnicas grupales podrían ayudar en este sentido, pero no dentro del marco de la formación, sino de los grupos de debate o discusión.

CONCLUSIONES

La mayor dificultad de inserción laboral alentada por la situación global de la economía, repercute en la mayor competencia entre mujeres por el trabajo.

La situación de mayor competencia se da entre mujeres extranjeras con documentación en regla y mujeres extranjeras sin la documentación completada.

Éstas últimas aceptan cualquier condición laboral, pero es la demanda la que presiona a la baja los salarios y las condiciones, ya que actualmente se hace más difícil la propia sostenibilidad de las familias españolas contratantes de servicios domésticos.

RECOMENDACIONES

La conciencia crítica sobre la realidad ayuda a entender la estrategia del mercado laboral para instaurar la competitividad de la mano de obra en aras de la productividad. Entender los mecanismos del mercado laboral evita, en gran medida, los prejuicios o estereotipos que dividen a dicha mano de obra y producen el rechazo y la insolidaridad.

Las técnicas grupales podrían utilizarse para procurar espacios comunes a personas con diferente situación legal y de distintas nacionalidades, como medio de combatir estereotipos y prejuicios y la competencia de la mano de obra. Por otra parte, podrían ayudar a unificar reivindicaciones conjuntas que incluyan a todos y todas.

CONCLUSIONES

La mayoría de las mujeres extranjeras que viene a España por motivos económicos y con la documentación sin completar, deben desempeñar, durante los primeros años, trabajos domésticos y del cuidado de personas. Las trayectorias laborales en este tipo de trabajo siguen una pauta parecida:
  • Servicio doméstico en calidad de interna.
  • Servicio doméstico como externa (asistenta a jornada laboral completa en una casa, o por horas en varias casas).
  • El aumento del Euribor (que repercute en una peor situación de las familias con créditos hipotecarios y también sirve de justificación para rebajar las condiciones laborales de las empleadas de hogar).
  • Paso a otro tipo de empleos en el Tercer Sector: hostelería, restauración, servicios de limpieza para empresas, en calidad de asalariadas pero en situación de precariedad contractual.
  • Servicios de proximidad (ayuda a domicilio y sus variantes): desarrollados en mayor medida en los últimos años, financiados por los Ayuntamientos, pero gestionados por Empresas de Trabajo Temporal, reproduciéndose la situación de precariedad.

El proyecto piloto confirma la remarcada etnoestratificación del mercado laboral restringido donde se insertan las mujeres migrantes. Pero también confirma la segregación vertical (o el llamado “techo de cristal”), que evita que éstas abandonen trabajos feminizados y de menor cualificación, pese al mayor nivel de formación que puedan tener.

Así mismo, confirma las dificultades de “exportabilidad de la mano de obra”, es decir, las escasas posibilidades de que las mujeres migrantes puedan desempeñarse en España en trabajos similares a los que han desempeñado en sus países de origen.

RECOMENDACIONES

Sería necesario ampliar aún más la oferta formativa y laboral de los servicios de empleo, en diversos sentidos:

  • Fomentar el emprendimiento y la autogestión en los servicios de proximidad, de cuidado y domésticos, con el fin de formar cooperativas o empresas donde participen hombres y mujeres.
  • Explorar nichos laborales diversos, creativos y no sólo feminizados.
  • Fomentar la incorporación de las mujeres en el Tercer Sector (ONGs), así como en el funcionariado.
  • Apoyar con mayores recursos los procesos de homologación de los títulos, así como el acceso a la formación universitaria.
CONCLUSIONES

En los últimos tres años aproximadamente, las mujeres extranjeras se encuentran con las mujeres españolas de menor nivel educativo en los servicios de proximidad produciéndose cierta competencia que no favorece la mejora de las condiciones laborales del sector.

El acceso de la mujer inmigrante a este tipo de empleos ha sido posible gracias a la intervención de las ONGs.

Sin embargo, el trabajo en los servicios de proximidad no soluciona los problemas de sostenibilidad económica de las mujeres: se cobra menos que en el servicio doméstico y se trabaja menos horas a la semana. Tampoco son una solución para las familias que los solicitan.

Pese a la mayor proximidad entre mujeres autóctonas y mujeres extranjeras en este tipo de empleos, los espacios de encuentro para intercambiar experiencias, apoyarse y reivindicar derechos laborales no se está dando hasta el momento.

RECOMENDACIONES

Se hace necesario superar los planteamientos demasiado especializados de los programas de empleo y fomentar un mayor encuentro entre mujeres autóctonas y extranjeras. Todo ello ayudará a desarmar estereotipos y a atenuar el rechazo social y la falta de integración de las mujeres migrantes.

Así mismo, los espacios de encuentro entre mujeres (de diversas nacionalidades incluidas las españolas) fomentarían estrategias colectivas de reivindicación, denuncia y solidaridad.

CONCLUSIONES

Otro de los problemas que entraña el tránsito de las mujeres extranjeras desde el servicio doméstico hacia el trabajo asalariado en el sector servicios, atañe a las dificultades para integrar equipos, sobre todo para quienes tienen menor nivel de formación. Estas dificultades parecen tener que ver con:

  • La escasa experiencia en el trabajo seriado y en equipo. La experiencia laboral de algunas mujeres extranjeras sin formación secundaria concluida en sus países de origen, está muy restringida a trabajos solitarios y en la economía sumergida (preparación de comidas caseras, venta ambulante, costura en el hogar, etc.)
  • La mayor permanencia (incluso durante años) en el sector del servicio doméstico, donde se trabaja sola y se asume gran responsabilidad sobre los hogares o sobre las personas a las que se cuida.
  • Las diferentes percepciones acerca de “qué es cuidar”, por ejemplo, en el trabajo en las residencias de personas mayores. Estas diferentes percepciones vienen dadas por procesos de socialización heterogéneos, no sólo atravesados por la nacionalidad, sino también la religión, el hábitus cultural, el género, la etnia, el diferente desarrollo de los Estados de Bienestar en los países de procedencia, etc.

Quienes mejor asumen el trabajo en equipo son las mujeres con mayor nivel educativo, pero éstas remarcan otro tipo de dificultades:

  • El trato autoritario y desagradable de algunas encargadas de equipos. O bien, la mala coordinación de los equipos por parte de los o las responsables.
  • La práctica de recargar a las recién llegadas de tareas. Lo cual es vivido por las mujeres extranjeras como “discriminación”.
  • La temporalidad de este tipo de empleos que repercute en la falta de tiempo para que la mujer que se inserta en los mismos desarrolle mejor sus estrategias de integración. Se termina aceptando la situación por temor a perder el empleo y no se solucionan los problemas en el seno de los equipos. Esto tiene que ver con la explosión de las formas de contratación flexibles del capitalismo avanzado, cuya consecuencia es la presencia, en un mismo equipo de trabajo, de personas con diferentes tipos de contrato laboral y de condiciones. Todo lo cual repercute también en la competencia entre las mismas.
RECOMENDACIONES

Es fundamental reforzar la tarea de acompañamiento durante el proceso de inserción laboral de estas mujeres incluso durante mucho tiempo después de haberse incorporado al trabajo y a sus equipos. Este acompañamiento tendría varias funciones:

  • Incorporación de técnicas de trabajo en equipo en la formación de mujeres que han estado mucho tiempo trabajando en el servicio doméstico.
  • Apoyo legal en caso de despidos improcedentes (en relación directa con los sindicatos).
  • Apoyo a la mejora de la contratación en el seno de la misma empresa, así como mejora de las condiciones laborales y de promoción con el paso del tiempo.
  • Apoyo emocional en caso de dificultades de integración por razones de discriminación.
  • Apoyo a las empresas en la gestión de la diversidad cultural de sus equipos. Fomento de la incorporación de técnicas y habilidades exportadas por las mujeres migrantes y el reconocimiento de las mismas como nuevas formas de cuidar.
  • Apoyo a las empresas en la incorporación de técnicas de gestión de equipos, coordinación y resolución de conflictos interculturales.
  • Fomento de la importancia de la conformación de equipos estables, preparados y constantes, sobre todo, de cara a la mejora de los servicios y de la productividad.
CONCLUSIONES

La conciliación de la vida laboral y familiar es más difícil en los trabajos asalariados del sector servicios: (en hostelería y restauración, por ejemplo). Lo que, en ocasiones, obliga a las mujeres a retornar al servicio doméstico donde puede ser posible cierta flexibilidad horaria.

Las ayudas que brindan los programas de formación y de inserción laboral de los servicios de empleo son bienvenidas por estas mujeres, pero no son una solución a largo plazo.

Pese a la cada vez mayor participación de las mujeres en los servicios de empleo y de que muchas de ellas llevan una media de cuatro años en España, se observa su desconocimiento de las regulaciones laboral, fiscal y de la Seguridad Social del país.

RECOMENDACIONES

Los servicios de empleo deben continuar profundizando en la línea de sensibilizar a las empresas sobre la necesidad de reconocer la importancia de la conciliación familiar, personal y laboral de sus trabajadoras/es, lo cual redundaría en la permanencia y satisfacción de éstas/os en sus puestos de trabajo. Este trabajo de sensibilización se tiene que unir a un importante esfuerzo de coordinación y sinergias con sindicatos y las administraciones territoriales.

Es preciso incrementar las actividades de formación en derechos laborales, contratación, sindicación, sistema fiscal y de la Seguridad Social.

CONCLUSIONES

La casi totalidad de las mujeres participantes en los talleres asumen, en gran medida, las tareas reproductivas. No obstante las migraciones producen reestructuraciones en el interior de las unidades familiares, llegando los hombres a ser una “ayuda” en estas tareas, al mismo tiempo que el trabajo productivo de la mujer se vuelve imprescindible, revalorizándose su función dentro de dichas unidades, incluso a nivel transnacional. Sin embargo, hay situaciones acuciantes para las mujeres en este sentido:

  • Las madres solteras, separadas o divorciadas que tienen hijos o hijas en España.
  • Las madres que tienen hijos o hijas con algún tipo de discapacidad o enfermedad.

Otra de las situaciones acuciantes es la de mujeres embarazadas que por temor a perder el empleo ocultan su estado y continúan trabajando al mismo ritmo laboral que si no lo estuvieran.

RECOMENDACIONES

Los servicios de empleo deben incorporar los cauces participativos grupales con el fin de establecer cauces de solidaridad que procuren paliar, en cierta medida, las dificultades de conciliación, sobre todo en mujeres cuya situación es más acuciante. En este sentido, los grupos permitirían:

  • Construir bancos del tiempo o intercambios de servicios.
  • Transferir estrategias y habilidades.
  • Crear grupos de apoyo mutuo.
CONCLUSIONES

Es llamativa la situación de las mujeres extranjeras mayores de 50 años que son reagrupadas por sus hijos o hijas para que les ayuden en su conciliación laboral, pero al mismo tiempo, deben trabajar en España para sostenerse ellas mismas. Su situación documental no les favorece: o bien están en irregularidad jurídica, o bien, tienen permiso de residencia pero no de trabajo, lo que las avoca al servicio doméstico sin contrato; al mismo tiempo que a dificultades de conciliación con el cuidado de sus nietos/as.

La transnacionalidad de la experiencia migratoria de las mujeres es un elemento fundamental de sus vidas. No se trata de estar “aquí” o “allí” físicamente, aunque esto también suceda, sino de un estar “aquí” y “allí” al mismo tiempo en cuanto a: la gestión de los cuidados; las redes de contactos, información e intercambio; la economía del hogar y de los emprendimientos; los problemas y las estrategias para solucionarlos, etc. En ocasiones, la transnacionalidad influye en el tipo de trabajos que las mujeres tienen en España, en su forma de inserción y en la continuidad en los mismos.

Somos seres interdependientes, interrelacionales y cambiantes.

RECOMENDACIONES

La intervención con este grupo es prioritaria. Las técnicas grupales podrían ayudar en algún sentido:

  • Creando grupos de apoyo mutuo en el que las mujeres, además de ayudarse, puedan intercambiar experiencias y habilidades.
  • Rebajando los niveles de ansiedad por su situación.
  • Fomentando la creación de autoempleo por parte de estas mujeres que suelen tener experiencia laboral y muchas habilidades relacionales.

Especial atención merece el apoyo psicológico de las mismas; así como el acompañamiento a sus hijas con cargas familiares.

Es fundamental incorporar la perspectiva de la transnacionalidad de las mujeres migrantes en los programas de empleo. Las técnicas grupales ayudarían a comprender la importancia de ésta, así como las consecuencias positivas y negativas que entraña. Todo lo cual debe ser tenido en cuenta en la intervención con fines de inserción laboral.

Toda intervención sociolaboral debe basarse en una visión flexible e integral de las personas.




RESUMEN

El desarrollo de los talleres de participación con mujeres con el objetivo de conocer lo que piensan, viven y sienten en relación al mercado laboral y a las discriminaciones de las que son objeto, nos lleva a confirmar la importancia de este tipo de técnicas grupales en los programas de empleo, cualquiera que sea la fase en la que se encuentren las personas (orientación, formación, intermediación, etc.), así como las fases del propio proyecto (análisis de la realidad, diseño de estrategias, desarrollo, evaluación, etc.). Por tanto, las técnicas grupales son instrumentos valiosos para trabajar distintos temas que los y las técnicas necesiten conocer. Además, la participación directa de las personas, la valoración de sus opiniones, el análisis de sus discursos y la potenciación de sus propuestas ayudan a mejorar las acciones llevadas a cabo, así como el apoyo que se les puede brindar.

En la implantación de las técnicas grupales no hay recetas idénticas para todos los servicios y para todos los contextos locales donde se quiera llevar a cabo, sólo podemos apuntar unas directrices mínimas y unas propuestas sobre qué funciones más útiles podrían tener las técnicas grupales dentro del marco de los programas de empleo.

Cruz Roja Española